Por lo general, cuanto mayor es el área geográfica que abarcan las cadenas de suministro, más complejas y costosas resultan para las empresas que las ponen en marcha. Especialmente, si el negocio tiene un enfoque global y comprende una extensa red internacional de organizaciones, recursos y actividades.
En estos casos, el éxito de la actividad depende de diversos factores, como una buena gestión logística, un adecuado flujo de la información o la capacidad de la compañía para adaptarse a las necesidades y requisitos de cada país. Aspectos que es aconsejable que queden en manos de profesionales capacitados para ejecutar con precisión y eficacia cada una de las operaciones.
De ahí la alta demanda actual de estos perfiles y que, en este artículo, queramos hablarte de las mejores técnicas que se pueden aplicar para optimizar las cadenas de suministro internacional de las empresas madrileñas y del resto de España.
¿Qué es la cadena de suministro y cómo ha evolucionado globalmente?
Si, a la hora de abordar su internacionalización, las empresas se preguntan cómo pueden producir y poner a la venta un producto o servicio en el extranjero, deben buscar la respuesta en el concepto de la cadena de suministro internacional. A este también se le conoce por su anglicismo, supply chain, y se puede definir como el conjunto de actividades, recursos, tecnologías y organizaciones que son necesarias para coordinar y gestionar la producción y distribución de bienes o servicios a escala global.
Por lo tanto, su objetivo es transformar materias primas en productos o servicios que lleguen al consumidor final en el extranjero. Una meta que cuenta con sus propios desafíos en comparación con las cadenas de suministro locales, porque en su caso hay que abordar problemas específicos, como las regulaciones internacionales, la coordinación de todos los actores implicados, la gestión de las operaciones de importación y exportación, el flujo de los datos y la información o las fluctuaciones del valor de las monedas.
Además, la presente década ha estado marcada por problemas que han alterado el equilibrio comercial global. La pandemia de COVID-19, los conflictos armados en Ucrania y Oriente Medio, y las tensiones económicas entre países —como las políticas arancelarias impulsadas por la administración Trump en Estados Unidos— han generado un entorno de incertidumbre que está impactando directamente en el sector logístico y del transporte. Esta situación ha ralentizado su crecimiento a corto plazo, con una previsión que pasa del 4,1 % estimado para 2025 a un 3,7 % en 2026.
Principales retos en la cadena de suministro internacional
En un mundo donde la inmediatez es cada vez más importante, poner en marcha una cadena de suministro global es una decisión delicada por los aspectos que hay que considerar y los problemas que pueden ir surgiendo en cada una de las etapas del proceso. El objetivo es minimizar al máximo los tiempos de espera de los clientes, y para ello hay que desarrollar una cuidada planificación y gestionar adecuadamente el stock, a la vez que se cumplen las normativas de cada país.
Conseguirlo no es fácil y, en muchas ocasiones, requiere de experiencia y de conocimiento profundo de los mercados. Aunque estar al tanto de los desafíos más actuales puede ayudar a enfocar mejor la estrategia y a invertir los recursos en aspectos del supply chain que realmente sean determinantes. Por eso, a continuación, destacamos lo más importantes.
Tensiones geopolíticas
Restricciones, cierres de fronteras, imposición de aranceles, incremento de la inflación y de los precios de las materias primas… Las cadenas de suministro internacional están necesariamente vinculadas como la sociedad y su economía, por lo que las empresas deben analizar este contexto antes de competir en un mercado concreto y valorar la estabilidad en la región o los costes de la producción.
Climatología y desastres naturales
El cambio climático está intensificando la cantidad de fenómenos extremos que se producen en todo el mundo, como inundaciones, sequías y olas de calor. Los desastres naturales son cada vez más frecuentes y los diferentes tipos de cadenas de suministro internacional también se ven afectadas por estos fenómenos, porque pueden producir interrupciones en el transporte, afectar a infraestructuras u obligar a modificar rutas. Motivos más que suficientes para que las compañías empiecen a adoptar estrategias para mitigar su impacto, como diversificar sus rutas o utilizar tecnología para predecir el tiempo con precisión.
Robos y delincuencia
En 2023, los robos de carga a nivel mundial se centraron especialmente en instalaciones (28 %), vehículos (14 %) y contenedores (13 %), con países latinoamericanos como México, Brasil y Argentina como los más afectados. Las industrias de la Alimentación y Bebidas (21 %), Agricultura (10 %), Electrónica (10 %), Combustible (8 %) y Metal (7 %) son las más perjudicadas por una problemática que anualmente causa miles de millones de dólares en pérdidas para las empresas y que puede generar importantes interrupciones en cadenas de suministro internacionales de carácter crítico.
Sostenibilidad y normativa
En España, el transporte representa aproximadamente el 30,7 % de las emisiones totales de gases de efecto invernadero a la atmósfera, unos datos similares a los mundiales. De esta forma, la logística global debe implicarse directamente en la lucha contra el cambio climático, aunque esto necesariamente tiene un impacto en los procesos y sus costes.
Medidas como optimizar las rutas, invertir en flotas de transporte eléctricas, implementar energías renovables o adoptar prácticas de economía circular requieren de esfuerzo y tiempo; y en muchas ocasiones no son una elección, sino una obligación por la entrada en vigor de normativas que fomentan la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.
Complejidad de la cadena de suministro y necesidad de trazabilidad
Las cadenas de suministro modernas involucran numerosos intermediarios y procesos, lo que dificulta a las empresas tanto su seguimiento como la correcta transferencia de información. Aunque la tecnología puede simplificar esta tarea, la implementación de sistemas de trazabilidad conlleva nuevos retos: desde desafíos técnicos y costes de implantación, hasta la necesidad de interoperabilidad y estandarización entre compañías y transportistas, así como la gestión eficiente de datos en tiempo real.
Ciberseguridad
La digitalización de los procesos es una estupenda manera de agilizar las cadenas de suministro de una empresa a escala internacional. Pero, al mismo tiempo, la expone a nuevos riesgos, porque los delincuentes pueden utilizar estos canales para obtener beneficios financieros, realizar espionaje industrial, efectuar sabotajes o tomar el control para dañar a otras empresas. Así, se estima que en 2024 crecieron un 60 % los ciberataques a las supply chains; un dato que refleja la importancia de que las organizaciones se tomen también muy en serio su ciberseguridad.
Escasez de materiales y componentes
Esta circunstancia afecta principalmente a las industrias tecnológicas y electrónicas, además de la automotriz. En los últimos años el ejemplo más claro está siendo la escasez de chips por la alta demanda de semiconductores —a raíz del desarrollo de la Inteligencia Artificial— y la excesiva dependencia del mercado asiático. Una carestía que se puede combatir mediante la diversificación de proveedores, el desarrollo de materiales alternativos, la inversión en innovación y estrategias regionales de producción o la colaboración entre los fabricantes para optimizar estas cadenas de suministro internacionales.

Estrategias para optimizar la cadena de suministro global en tu empresa
Para superar los desafíos mencionados, minimizar los costes asociados a la internacionalización e incrementar la rentabilidad de sus supply chains, las compañías pueden actuar directamente sobre diferentes áreas:
Planificación y estrategia global
Es importante elegir bien tanto los proveedores como la ubicación de los procesos productivos. Normalmente, mover la mayor parte de la cadena de producción a países próximos o aliados reduce considerablemente los costes; mientras que la diversificación permite combatir la escasez y otorga flexibilidad para lidiar con otros problemas que puedan presentarse, como los robos. Además, trabajar con una planificación bajo demanda permite realizar una mejor gestión de los stocks y anticipar las necesidades de los clientes.
Gestión de los inventarios
En los últimos años el coste de los almacenamientos logísticos ha crecido considerablemente (hasta un 10 % a nivel mundial en 2023), por lo que las empresas no pueden permitirse almacenar sus mercancías durante largos períodos de tiempo para no disparar sus costes. Para ajustarse lo máximo posible a la demanda, pueden aplicar la metodología Just-In-Time con el objetivo de minimizar sus inventarios y acortar los tiempos de producción, abrir centros de distribución cercanos a sus mercados clave o emplear métodos predictivos para anticiparse a las necesidades de sus clientes.
Gestión del transporte y de las rutas
Hoy en día, la tecnología es fundamental para elegir las rutas más rápidas y económicas, ya que incluso permite conocer en tiempo real el estado del tráfico por carretera. Esto, junto a una buena consolidación de las cargas para ajustar los costes del transporte, y a cierta flexibilidad para combinar los medios de transporte según las circunstancias, puede contribuir de forma decisiva en la mejora del rendimiento de una cadena de suministro empresarial.
Trazabilidad de la cadena de suministro internacional
A lo largo de todo el recorrido de una supply chain, pueden surgir problemas u oportunidades de mejora. Y digitalizarla es la mejor forma de facilitar su visibilidad en tiempo real, porque la utilización de Sistemas de Gestión de la Cadena de Suministro (SCM), de soluciones IoT y de sensores ayuda a monitorizar cada aspecto de la mercancía, especialmente relacionado con el transporte. Mientras que la tecnología blockchain permite crear registros descentralizados, seguros e inmutables de las transacciones que se realizan, lo que resulta muy útil para seguir los envíos, verificar la procedencia de los productos y gestionar la documentación.
Análisis y previsión de riesgos
Las cadenas de suministros de las empresas deben ser resilientes para adaptarse a entornos cambiantes. Como hemos indicado, en cualquier momento puede aparecer un nuevo problema —como un conflicto geopolítico, una normativa o climatología adversa — que obligue a modificar la estrategia. Contar con un adecuado plan de riesgos permite actuar de forma inmediata para minimizar los daños y aplicar medidas de contingencia.
Relaciones con terceros
El éxito de las cadenas de suministro no solo está en manos de la empresa que las pone en marcha, también de sus proveedores, socios y clientes. Impulsar espacios de colaboración como plataformas, compartir información, impulsar alianzas estratégicas con proveedores y operadores logísticos clave, y cerrar acuerdos flexibles —que permitan adaptarse a cambios o necesidades puntuales— mejorará su eficiencia y también servirá para fortalecer la imagen de la organización en los mercados internacionales.
Capacidad de evaluación con el propósito de mejorar
Una estupenda forma de optimizar la cadena de suministro internacional es analizarla constantemente desde un enfoque crítico. La empresa debe definir indicadores clave de desempeño (KPIs) para evaluar en tiempo real su eficiencia y detectar aquellos aspectos que puede mejorar, como los tiempos de entrega, los costes del transporte o el nivel de satisfacción del cliente. Y, a partir de ellos, llevar a cabo auditorías periódicas para obtener una visión global del trabajo y, de esta forma, poder revisar sus procesos y acuerdos con proveedores y socios.
La formación es clave para liderar cadenas de suministro internacionales
Otro problema actual que preocupa especialmente a los responsables de las cadenas de suministro internacionales es la escasez de mano de obra cualificada y de especialistas en logística. En 2024, la encuesta realizada por el Salón de la Fama de la logística en cooperación con el Schunck Group reveló que el 35 % de las empresas han sufrido pérdidas económicas por falta de personal adecuado y que el 26 % creen estar en un riesgo alto de sufrirlas. De hecho, 6 de cada 10 compañías entrevistadas consideran esta amenaza como la segunda de mayor importancia, solo superada por la ciberdelincuencia.
En este sentido, llama la atención que, según datos de Randstad, el 59 % de los ocupados en el sector de la logística no haya completado estudios profesionales. Una situación que los expertos consideran que se debe al vacío existente entre la oferta académica actual y la necesidad empresarial. Un vacío que en la Escuela de Negocios de la Cámara de Madrid llenamos con nuestro Máster en Supply Chain Management.
Esta es una Doble Titulación (de Título Propio de la Universidad Complutense de Madrid y Título de la Cámara de Comercio de Madrid) destinada a personas que ya poseen un título universitario del Espacio de Educación Superior (EEES) o de sistemas ajenos a este que esté debidamente legalizado (con apostilla de la Haya), estudiantes universitarios con un máximo de 30 créditos ECTS pendientes o profesionales sin titulación, pero que acrediten su experiencia laboral.
¿Qué te aportará este plan formativo para la gestión de las cadenas de suministro?
Este Máster tiene una duración de 450 horas y se realiza con una metodología práctica para que el alumno aprenda a desarrollar sus habilidades profesionales, de forma que aprenda a ser un profesional de las operaciones y de las cadenas de suministro. Por eso, el profesorado está integrado por directivos y profesionales expertos en logística, transporte nacional e internacional, y operaciones; y el programa incluye:
- La asistencia a conferencias de expertos para el desarrollo de habilidades directivas.
- Visitas profesionales a aduanas marítimas, Ferias internacionales en IFEMA, empresas internacionales de logística y distribución…
- La asesoría de directivos de las principales empresas logísticas, como ACCIONA, UPS, CEL, AIRBUS, DHL, ALSA, SEUR, KHUNE & NUGEL, GXO, GRUPO SENDING, LEROY MERLIN… para informar sobre ofertas de empleo y participar en el Curso.
- La realización de prácticas en el sector.
Así, al terminar como profesional estarás totalmente preparado para contribuir con éxito al desarrollo de una cadena de suministro global desde cualquier perspectiva: por ejemplo, como Director de Supply Chain, de Operaciones, de Logística, de Distribución, de Importación/Exportación o de Compras; o como Consultor de Logística y Operaciones, Key Account Manager o Jefe de Almacén. ¡Entre otras muchas!
El cambio se está produciendo ahora y tú puedes formar parte de él
En definitiva, la gestión de la cadena de suministro internacional es un factor estratégico clave para las empresas que buscan crecer en un entorno global cada vez más complejo. Adaptarse a los cambios geopolíticos, climáticos, tecnológicos y normativos es necesario y puede marcar la diferencia entre el éxito y la ineficiencia operativa.
Contar con profesionales capacitados, capaces de anticipar riesgos y optimizar procesos logísticos a escala global, es más importante que nunca. Por eso, la formación especializada en supply chain y logística internacional —como la que ofrece el Máster de nuestra Escuela de Negocios—se ha consolidado como una inversión estratégica para empresas y profesionales que quieren liderar el cambio.