Los departamentos financieros y administrativos son claves en las empresas para garantizar el desempeño eficiente y optimizar los recursos, de manera que el retorno de la inversión durante la operación se incremente.
La administración y las finanzas como escenario clave
Estos departamentos suelen caracterizarse por un desempeño basado en el uso altamente eficiente de sus propios recursos, lo que suele traducirse en reducciones importantes de costes, una filosofía que después es trasladada al resto de la empresa.
Una muestra de esta forma de operar se observa en los resultados del informe Finance 2030: Four imperatives for the next decade (Finanzas 2030: cuatro imperativos para la próxima década), realizado por la consultora McKinsey & Company, en los cuales se observa que en las empresas de sectores muy diversos que participaron en este estudio, los departamentos financieros consiguieron reducir de media un 30% los costes de su propia operación.
Y es que, según advierten sus autores, Ankur Agrawal, Steven Eklund, Josh Waite, y Ed Woodcock, es falsa la idea de que, en los departamentos financieros, se debe elegir entre la reducción de costes o el aumento de su eficacia, ya que como queda demostrado en su informe, son dos elementos compatibles.
¿Cómo actúan los equipos líderes en Administración y Finanzas?
El análisis del desempeño de los departamentos de finanzas realizado para McKinsey & Company se realizó con el objetivo de detectar cuáles habían sido las claves del éxito en la última década y qué tendencias debían marcar el futuro de esta área tan relevante de las empresas.
Así, identificaron que los equipos líderes en Administración y Finanzas diseñan estrategias y sinergias para garantizar que las compañías en las que operan generan valor añadido, destacan por su capacidad de reducción de costes innecesarios y por impulsar la transición hacia un enfoque en el que se priorizan las funciones que generan más valor añadido.
Este último punto es quizá el más relevante, ya que según indican Agrawal y su equipo, los departamentos de finanzas líderes analizados en su estudio destinan actualmente un 19% más de sus recursos humanos a actividades de alto valor agregado de lo que lo hacían una década atrás, y esta tendencia deberá intensificarse cada vez más.
Pero, para seguir desarrollando funciones de alto valor, será necesario modificar las prioridades del pasado y adaptarse a las necesidades actuales del sistema económico, según señalan en este informe. Y destacan algunos puntos interesantes en los que habrá que centrarse, entre los cuales son especialmente relevantes la importancia de convertirse en líderes altamente especializados en la gestión de datos y la capacidad para tomar decisiones, basadas en el uso de técnicas analíticas avanzadas.
A conclusiones similares llega la consultora Deloitte, en su informe Finance 2025: Digital transformation in finance (Finanzas 2025: Transformación digital en las finanzas). Ahí, indican que las finanzas se están transformando al análisis en tiempo real y que los informes periódicos ya no serán las principales fuentes para la toma de decisiones.
También prevén que proliferarán cada vez más APIs y su funcionamiento adecuado requerirá de la capacidad de estandarización y optimización de datos.
Procesos como la automatización y la innovación cognitiva, así como tecnologías como el blockchain, continuarán desarrollándose a buen ritmo, lo que permitirá a los especialistas en finanzas liberarse de tareas tediosas y enfocarse en aquellas de alto valor añadido.
Un futuro de alta empleabilidad
Como consecuencia de las tendencias antes señaladas, sabemos que el futuro del área de Administración y Finanzas es prometedor y es previsible que se generen oportunidades laborales de calidad, pero estas requerirán de un nivel de cualificación cada vez mayor, por lo que una formación de alto nivel y actualizada es fundamental para desempeñarse en el sector.
Ante este panorama tan halagüeño como desafiante, la Cámara de Comercio de Madrid apuesta por la formación profesional para facilitar a los especialistas del sector la actualización y la alta especialización. Y, en este contexto, oferta un título oficial de Técnico Superior en Administración y Finanzas, el cual se puede estudiar en modalidad virtual, a distancia y de manera flexible, para facilitar la conciliación y compatibilidad con el trabajo.
En definitiva, el área de finanzas y administración viene de una década en la que ha demostrado un excelente desempeño y el que este se mejore en el futuro dependerá en gran medida de la formación y actualización constante de sus especialistas para ser capaces de aumentar esa tendencia tan marcada y tan eficaz que es el enfoque cada vez mayor en las tareas de alto valor añadido.