Las ventajas fiscales y estratégicas de acoger alumnos en prácticas

Escuela de Negocios09/12/2025
 

Incorporar alumnos en prácticas es una de las decisiones más inteligentes que puede tomar una empresa que busca crecer, innovar y mantenerse competitiva. Más allá del compromiso con la formación, este modelo ofrece beneficios reales y medibles: desde un impulso natural a la innovación hasta la captación de talento joven.

¿Por qué a las empresas les interesa acoger alumnos en prácticas?

Acoger estudiantes abre la puerta a nuevas ideas, dinamiza equipos y permite detectar perfiles con gran potencial antes de su incorporación definitiva. Las empresas que apuestan por este modelo lo ven como una inversión estratégica capaz de generar retorno tanto en el corto como en el largo plazo.

Beneficios estratégicos para el crecimiento empresarial

Los estudiantes en prácticas aportan frescura, motivación y nuevas perspectivas. Para una compañía, este apoyo supone:

  1. Refuerzo del equipo sin aumentar la estructura fija. Muchas empresas se preguntan cuántos alumnos en prácticas puede tener una empresa, y la realidad es que el límite depende del tamaño y capacidad formativa de cada organización, lo que permite adaptarlo a sus necesidades.
  2. Detección temprana de talento. Tener alumnos cerca permite observar su desempeño real, valores y capacidad de aprendizaje, facilitando futuras incorporaciones.
  3. Mejora de la marca empleadora. Las compañías que ofrecen oportunidades formativas son percibidas como organizaciones responsables, modernas y comprometidas con la sociedad.

Impacto en la innovación y el desarrollo del talento joven

Incorporar talento joven supone abrir la puerta a perfiles familiarizados con nuevas tecnologías, metodologías ágiles y herramientas digitales. Este impulso es especialmente valioso en sectores que evolucionan rápidamente.

Ventajas fiscales de contar con estudiantes en prácticas

Más allá del valor estratégico, acoger estudiantes también conlleva beneficios económicos que reducen costes y mejoran la sostenibilidad de los proyectos de formación.

Reducción de costes y beneficios en cotizaciones sociales

En el caso de prácticas formativas no laborales, las empresas pueden beneficiarse de bonificaciones importantes en las cotizaciones. Esto convierte a la incorporación de estudiantes en una alternativa más económica para reforzar equipos y asumir picos de actividad sin comprometer la estructura salarial.

Además, acoger alumnos en prácticas permite optimizar la inversión en recursos humanos gracias a modelos de colaboración flexibles y perfectamente regulados.

Diferencias entre alumnos en prácticas no remuneradas y remuneradas

Es clave distinguir entre:

  • Alumnos en prácticas no remuneradas: suelen corresponder a programas vinculados a instituciones educativas. Las empresas asumen funciones formativas, pero no existe relación laboral.
  • Prácticas remuneradas: implican una compensación económica acordada. Dependiendo del convenio o programa, pueden aplicar determinadas bonificaciones.

Ambas opciones son válidas, aunque la decisión dependerá del tipo de convenio y del objetivo formativo. En todos los casos, la empresa obtiene valor añadido sin necesidad de realizar una contratación tradicional.

Cómo contratar estudiantes en prácticas paso a paso

Si te preguntas cómo contratar estudiantes en prácticas, el proceso es más sencillo de lo que parece. Generalmente, las empresas deben seguir estos pasos:

  1. Definir el puesto formativo y las tareas del estudiante. Es fundamental que las actividades estén alineadas con su plan de estudios.
  2. Firmar un convenio de colaboración con el centro formativo. En este documento se establecen horarios, duración y responsabilidades.
  3. Acoger y formar al alumno dentro del equipo. Designa un tutor o responsable que pueda acompañar su proceso de aprendizaje.
  4. Realizar evaluaciones periódicas. Esto permite asegurar que la experiencia es útil para ambas partes.

Con este proceso, contratar estudiantes en prácticas se convierte en una vía ágil y eficaz para sumar talento y reforzar todas las áreas de tu negocio.

Apostar por alumnos en prácticas no es solo una decisión responsable: es una estrategia inteligente para impulsar la competitividad, optimizar recursos y acercarte a profesionales preparados y motivados. 

En la Escuela de Formación Profesional de la Cámara de Comercio de Madrid, formamos a estudiantes listos para integrarse en el entorno empresarial real y aportar valor desde el primer día. Si tu empresa quiere crecer, innovar y atraer talento, este es el momento de abrir sus puertas a la próxima generación de profesionales.